Nuestros
alumnos fuera de la escuela casi NO hacen actividad física, y si la realizan es
con un fin competitivo. A partir de encuestas y seguimientos realizados en el
alumnado de nuestra Institución (Nivel Medio), las cifras obtenidas son
preocupantes: sólo el 36% del alumnado realiza actividad física fuera de la
Escuela (38,5% mujeres – 61,5% varones), y de manera competitiva. Analizándolo
desde el género, los varones presentan un mayor porcentaje de práctica
deportiva (38,0%) respecto a las mujeres (33,0%). Teniendo en cuenta el “hogar”
y si alguien realiza actividad física sistemática, en el 47,4% de las familias,
por lo menos un integrante realiza actividad física, siendo alarmente que de
esa población activa, sólo el 11,4% corresponde a padres o tutores.
Esta realidad
nos indica que, el componente cuantitativo necesario para promover
modificaciones importantes en la conducta relacionados con el movimiento NO
esta presente, por ello, nuestro PRINCIPAL OBJETIVO como docentes responsables
del espacio curricular Educación Física pasa por ATACAR - ABORDAR el componente
cualitativo y motivacional o fruitivo de las prácticas corporales, tratando de
contrarrestar la ausencia del tiempo adecuado para aprendizajes óptimos.
(Inspirado en Rubén Pérez, 2010).